Sunday, March 21, 2010

YA EN DVD



PARIS

Cédric Kaplish sigue siendo una “rara avis” en el cine francés contemporáneo y dentro del cine europeo en general. Autor de comedias dramáticas originales como y dotadas de indiscutible frescura como “Cada uno busca su gato”, y de películas tirando a banales y preferentemente destinadas al público y a la taquilla como su saga de “El albergue español”, se adentra en esta ocasión, con brío y desiguales resultados, en el drama humano e intimista y en la ópera social y el drama costumbrista. “Paris” es la historia de una ciudad, mitificada donde las haya, observada con un tono a la vez grave, irónico, distanciado, humano y colorista. El eje de la historia es la enfermedad grave de Pierre (Romain Duris) quien, creyéndose a punto de morir, se convierte en un observador pasivo de los encantos y miserias de una ciudad caleidoscópica y llena de contrastes. El desapego existencial, la melancolía y su hundimiento emocional de Pierre nos recuerdan la mirada tierna y lúcida de algunos personajes de Francois Ozon o Eric Romer aunque la aproximación de Kaplish es más despreocupada y mucho menos honda. Entre los muchos -tal vez excesivos- temas del filme, encontramos el desamor, las relaciones familiares, la búsqueda de la dignidad y la estabilidad económica y la infinita soledad que se dejan sentir en el seno de una ciudad bulliciosa que resulta para unos un paraíso de colores y mezcla de culturas y para otros una trampa o un lugar inhóspito y lleno de dolor y de heridas abiertas por el paro, la inmigración, la infelicidad, los prejuicios raciales, los dilemas familiares y la virulenta escisión entre la realidad y las apariencias.


“Paris” es un filme tentado por la grandilocuencia y que abarca demasiadas historias y “vidas cruzadas”, demasiados temas y nudos dramáticos planteados con cierta fuerza y realismo, pero que o bien no se resuelven de modo satisfactorio o, sencillamente, no se resuelven. El filme se apoya en una espléndida Juliette Binoche que ha alcanzado una madurez interpretativa encomiable, aunque abuse de recursos dramáticos y matices que ya ha utilizado para otros personajes en filmes de Techiné u Oliver Assayas. El tono del filme resulta algo frío e insincero a pesar de la eficacia y sobriedad con la que Kaplish se acerca a sus criaturas que siguen viviendo, trabajando y amando pese a las heridas intimas y la incertidumbre colectiva que parece haberse adueñado de una ciudad luminosa presentada en tonos grises, filmada con cierto amor, pero también con algo de tristeza y desencanto. Así, nos vamos encontrando con la enfermedad de Pierre y la soledad afectiva de Elise (Binoche) que trata de fingir entereza ante circunstancias cada vez más adversas, la búsqueda del éxito profesional de un locutor de televisión o un profesor de universidad, el viaje desesperado de un inmigrante procedente de Camerún, etc.. Un relato balzaciano con ecos del neorrealismo italiano tardío y del cine francés social, algo devaluado por la necesidad de contar demasiadas historias y de cautivar al espectador con escenarios variopintos, planos enfáticos o motivos visuales que chocan violentamente entre sí.

Kaplish logra un filme interesante y lleno de buenos momentos, en particular gracias a la eficacia de actores y actrices y a la fuerza de los personajes, pero mezcla demasiados temas como si quisiera contarlo todo sobre una ciudad desbordante a través de la historia demasiado compleja de personajes desamparados a los que describe de una forma eficiente pero algo apresurada, tópica y superficial. Estamos, pues, ante un filme apreciable y ante un director al que hay que seguir la pista, pero también ante un melodrama romántico y una comedia satírica algo ampulosa donde Kaplish se decanta por una mirada epidérmica y deshilvanada sobre conflictos graves que traza con brío para después pasar de puntillas sin llegar nunca al fondo del asunto.

Thursday, March 18, 2010

ELOISE


Recién estrenada en DVD, "Eloise" es una agradable sorpresa en el desértico panorama del cine lésbico de producción española. Dirigida por el catalán Jesus Garay- realizador mal conocido donde los haya- "Eloise" es una historia de amor imposible entre dos chicas jóvenes de caracteres muy diferentes y que, aparentemente, están destinadas a no encontrarse. Narrada como un largo flash-back, "Eloise" destaca más por su universo visual que por su dramaturgia algo trillada. Con ecos del clásico "When night is falling" de Patricia Rozema y también con imágenes más propias del universo crispado y malsano del director de "Manderlay" o "La bañera", "Eloise" es una hermosa fábula romántica algo estropeada por un guión algo altisonante y unos personajes que, en algunos momentos. se acercan al estereotipo.
Eso no me impide disfrutar de las imágenes llenas de gancho de esas dos chicas que se unen en un momento crucial de sus vidas. Hay sexo, erotismo y sensibilidad en "Eloise" al contrario que en otras de historias de amor entre mujeres del cine reciente y hay también una violenta requisitoria contra una sociedad hipócrita y machista, dominada por la envidia, el tradicionalismo, la avaricia, la ñoñería y el odio a todo lo diferente. Garay logra gracias a una puesta en escena meticulosa que entremos en un universo donde nada es lo que aparenta. Solo el innecesario tono elegiaco, fatalista y el aparatoso final estropean el disfrute de una película rodada con afecto, delicadeza e interpretada de manera más que digna. Eloise y Asia son dos nombres femeninos que junto con Jesus Garay ya forman parte de la "otra historia del cine catalán". Villaronga, Garay, Jordá, Marta Balletbó-Coll , Marc Recha, Ventura Pons, Chus Gutierrez se han abierto ya camino entre la incomprensión y la estulticia. Un filme no estrenado comercialmente en Burgos y que tampoco veremos ya que el Aula de Cine y Circo de la Ubu esta más corrompida que la calle Génova, Gurtel, etc. Pero como diría Almodovar "Ese melón mejor no abrirlo..."